¿Qué es mejor, alentar o elogiar a nuestros hijos?

Publicado: 27/02/2023 12:06

Existen dos grandes diferencias entre estas expresiones en las que se tiene que lograr un equilibrio para generar autoconfianza en los hijos.

[Foto: Freepik] / Imagen referencial

Existe una gran diferencia entre elogiar y alentar a los hijos, que muchas veces suele confundirse y que a la larga pueden desencadenar problemas. Por ello es muy importante conocer la autoconfianza y autoestima de los hijos, señaló Moira Rueda, coach en inteligencia emocional.

Entre los ejemplos para diferenciarla señaló, el caso cuando un niño saca 10 en el examen, puede ocurrir que el papá exprese orgullo y le haga conocer esto a su hijo. Pero que diferente es cuando, se alienta por haber obtenido este resultado donde se le reconoce el esfuerzo del proceso que llevó al menor hasta el resultado.

“Parece que fuera lo mismo, pero marca la diferencia en el resultado. Es por eso que vemos luego adultos, que buscan la aprobación en todos los demás como el jefe, la esposa, y buscan sentir esa validación para sentirse amados, de ahí la importancia de nunca poner en juego el amor que como mamás o papás podemos sentir para nuestros hijos”, dijo.

Aunque parece algo sutil, Moira señaló un experimento científico que hizo Carol Dueck, con dos grupos de niños al que denominó ‘grupo 1’ y ‘grupo 2’. Ambos armaron rompecabezas, pero a los primeros los felicitaron por haber terminado el rompecabezas mientras que lo segundos recibieron aliento donde les reconocieron sus habilidades para lograr este resultado.

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Posterior a ello les dieron para hacer otro rompecabezas pero el ‘grupo 1’ eligió uno de mayor facilidad para seguir recibiendo felicitaciones, mientras que el segundo, se inclinó por uno complejo porque sintieron que tenían la capacidad.

Y es ahí donde se quiere llegar, que aunque se equivoquen pueden volver a intentarlo. “No quiero decir que los elogios están mal, para nada, es bueno elogiar a nuestros hijos porque ellos tienen un deseo inherente de sentirse valorado, aceptados, integrados (...) lo grave es cuando solo lo elogiamos “, dijo.

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