Pecó de confiada: Érika y una devolución que nunca olvidará

Antes de llevar su plato donde el jurado de MasterChef, Érika dijo que no interfirió en la decisión del plato que cocinaron y que dirigió a sus compañeros. Al llegar frente a los jueces fue recibida por Coral, quien le pidió explicar “¿Cuál era el objetivo del ají en su preparación?”.

Según Érika, como no tenían nada picante, pensaron en utilizarlo porque hay personas que lo comen y otras que no. Tras la respuesta, Coral le señaló si el ají pasó por algún proceso o técnica por lo cual Érika, respondió que no. “Solamente lo hemos puesto así porque ya no alcanzaba”.

“Me lo tengo que comer así crudo”, le dijo Coral, por lo cual Érika le dijo “si usted quiere”. Sin embargo la chef, la invitó a dar un bocado al ají. “Vas a comer tú mi decoración porque todo lo que se pone de decoración se come”, le dijo.

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Pero eso no fue todo porque la evaluación del plato de Érika no tuvo buenos comentarios pues el término de cocción de la carne del bife de chorizo estaba crudo y además Coral le señaló a ella y a todos su compañeros, “que no vuelvan a colocar el plato un ají que “parece haber salido de la verduleria como si lo hubieran botado”.