Gobierno prevé que el sector privado asuma gradualmente el abastecimiento de combustibles
Desde el Ministerio de Hidrocarburos se apunta a traspasar gradualmente esta responsabilidad en un plazo de seis meses, tomando en cuenta que el sector privado tiene capacidad financiera para el suministro
El Gobierno anunció que en un plazo de seis meses prevé traspasar gradualmente la responsabilidad del abastecimiento de combustible al sector privado, de acuerdo con un reporte del Ministerio de Hidrocarburos, tema que apunta a “preservar la estabilidad del mercado de combustibles y garantizar el abastecimiento a mediano plazo.
“El Gobierno anunció que en un plazo de seis meses prevé traspasar gradualmente esta responsabilidad al sector privado, que cuenta con la capacidad financiera para asegurar el suministro mediante cartas de crédito y contratos de hasta cinco años”, reza el reporte institucional.
Asimismo, el ministro de Hidrocarburos, Mauricio Medinaceli, explicó que esta medida forma parte de un plan integral que contempla licitaciones internacionales por bloques de mayoreo —un esquema que funcionó entre 2000 y 2005— y un ajuste responsable de los márgenes internos del precio, con el fin de gestionar de manera sostenible el subsidio a los combustibles.
En este sentido, la autoridad señaló que el país enfrenta un doble desafío: asegurar el ingreso del combustible al territorio nacional y garantizar que llegue efectivamente a la población.
“El combustible está ingresando al país, pero el segundo desafío nos mantiene en monitoreo constante”, expresó el minsitro al advertir que redes de corrupción desvían carburantes hacia países vecinos o al mercado negro interno, lo que genera presión en la demanda y explica las filas en los surtidores.
Medinaceli detalló que, por cada cisterna desviada, las ganancias en el mercado ilegal oscilan entre Bs 200.000 y 300.000, montos que superan ampliamente decenas de salarios mínimos, remarcando que el grueso del problema es el combustible que sale del país, principalmente hacia Perú, Chile y Paraguay, donde el precio es mayor.
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El ministro subrayó que el problema de fondo es financiero y dijo que, pese a la existencia de contratos en el pasado, no se contaba con la solvencia necesaria para ejecutarlos, aunque destacó que la recuperación de la confianza del sector financiero, de organismos multilaterales y de los proveedores permitió normalizar la provisión de combustibles.
Respecto al subsidio, Medinaceli aclaró que el Gobierno no aplicará medidas improvisadas, es decir, “no se trata solo de una respuesta de emergencia, sino de un plan de corto y mediano plazo”, tomando en cuenta que el precio de los combustibles responde a una estructura compleja que incluye referencia internacional, refinación, transporte, impuestos y regalías.
Además, anunció que, una vez traspasada la distribución al sector privado, el Gobierno trabajará en una nueva Ley de Hidrocarburos, basada en dos pilares: un sistema impositivo acorde a la realidad de cada campo y una nueva tipología contractual que distribuya riesgos entre el Estado y el sector privado, con el objetivo de atraer inversiones y recuperar la producción.
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