Tras una triste despedida durante el domingo de eliminación, el jurado levantó los ánimos de los cocineros con una temática de fiesta. Al ingresar a MasterChef, Giuliana, Érika, Bernardo, Noelia y Brishel encontraron un ambiente de fiesta y colores, decorado con globos y golosinas.
Antes de revelar el desafío Anabel Angus, los hizo “jugar” un poco moviéndose de sus estaciones y colocándose en otro lugar. “Una dulce noche trae también una noche de sorpresas”, dijo Anita para luego dar la orden de levantar las telas negras que tenían sobre sus estaciones.
Al hacerlo, los participantes encontraron una infinidad de ingredientes, como dulce de leche, chocolate, crema de leche, mantequilla, leche condensada. Aunque algunos de ellos imaginaron de qué podría tratarse el desafío, Coral Ayoroa se adelantó y anunció que “esta noche tenían ganas de festejarlos y vivir un verdadero cumpleaños”.
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Por ello, Marcos Gonzalez, añadió que los cocineros tendrán que realizar seis galletas, tres de un sabor y el resto de otro, además de seis cake pop, que deberán bañar en chocolate para que queden perfectos.