Un desafío a la altura del nivel de competencia en el que se encuentran los cocineros. así fue el reto del último miércoles de estrellas en MasterChef ya que el jurado trajo para el desafío un lomo Wellington, un plato emblemático que se ha preparado en todas las versiones del mundo de MasterChef.
Cuando el jurado reveló el desafío, explicó que este plato se ganó su lugar en la gastronomía internacional y el respeto de los cocineros alrededor del mundo. Este plato es una preparación recubierta de una masa con un pedazo de lomo en el centro.
Para tener un buen lomo Wellington, Marcos Gonzalez explicó que, se debe sellar la carne de lomo a la perfección y luego untar con una mostaza de dijon para luego reservar en frío y señaló que toda la capa que recubre es una duxelle hecha de cebolla, champiñones, ajo y paté, además que lleva una capa de jamón serrano. Se envuelve en una masa de hojaldre y se hornea.
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Pero eso no fue todo porque los jueces resaltaron que el lomo Wellington tenía que esta acompañado con una guarnición y salsa a elección, además que tenían que terminar el plato en 70 minutos.
Un reto que sin duda alguna está a la altura de los niveles de competencia de la recta final de MasterChef donde la presión y la tensión aumenta cada vez más porque a diferencia de otras noches ahora los participantes cocinan todos los días.